martes, 24 de septiembre de 2013

La destrucción del Patrimonio de la Humanidad de Cirene.


Nos pasa nuestro profesor Xabi Velasco, el siguiente enlace del periódico El País sobre la destrucción de uno de los sitios arqueológicos de Libia: la ciudad de Cirene. http://blogs.elpais.com/con-arte-y-sonante/2013/09/la-destruccion-del-patrimonio-de-la-humanidad-de-cirene.html).

Cyrene
Cirene (Libia)

Resulta que un grupo de agricultores que consideran que esos terrenos les pertenecen, están "limpiándolos" de todo vestigio arqueológico, haciendo parcelas de 500 metros cuadrados y vendiéndolos a distintos promotores inmobiliarios. Solo puedo disculpar un hecho así pensando que la ignorancia es muy atrevida y que  si ésta se une a la avaricia, los resultados son desastrosos como en el caso que nos ocupa.  

El objetivo de esta nueva entrada en mi blog es intentar aportar alguna solución para impedir que otras "Cirenes" sean devastadas. Sinceramente, lo único que puedo hacer es divulgar la noticia entre mis amigos y conocidos y pedirles que hagan lo mismo con los suyos, pero estoy convencida de que es un tema que no llama mucho la atención y que muchos pensarán que Libia queda muy lejos y que ese es "su" problema. Deben ser los gobiernos quienes establezcan sanciones y promulguen leyes que impidan este tipo de aberraciones. Pero la historia nos ha demostrado que muchos gobiernos también se benefician del reparto del pastel, por lo que mucho me temo que no habrá solución. Y lo lamento.    


sábado, 21 de septiembre de 2013

Las cajas españolas

Las Meninas de Velázquez



Cuando le pregunté a mi pareja que qué sabía de "las cajas españolas" me contestó que si me refería a las Cajas de Ahorros, a Bankia y a todo ese follón en el que nos hemos visto envueltos en este país. Ese fue el momento ideal para meterme en la página de youtube y volver a ver el reportaje que vimos en clase con Xabi y del que adjunto el enlace: las cajas españolas
Me ha encantado el documental porque no solo relata uno de los episodios políticos más dolorosos y recientes de nuestra historia sino porque explica con bastantes detalles la mayor operación logística llevada a cabo para salvar más de 1800 obras de arte. Unas de las que se salvaron de la destrucción bélica fueron Las Meninas, de Velázquez y el Autorretrato de Durero, cuyas imágenes se encuentran al margen derecho de esta página. 
Autoretrato de Alberto Durero

La labor desarrollada por determinados intelectuales, por miembros del gobierno republicano y por personas anónimas que tenían muy claro que había que defender y proteger nuestro Patrimonio Artístico, me ha resultado encomiable. ¡Chapeau! por todos ellos y ojalá que en vez de una simple placa de agradecimiento en el Museo de El Prado, se colocaran muchísimas placas debajo de cada cuadro que ayudaron a salvar del desastre de la guerra. No quiero entrar en consideraciones políticas sino solo centrarme en las tareas llevadas a cabo para la protección de los cuadros; la frase de que "la necesidad agudiza el ingenio" nunca ha sido tan cierta como en este caso. Yo animaría a que este documental se exhibiera en todas las clases de Historia para dar la oportunidad a que los jóvenes supieran algo más sobre el valor de nuestro Patrimonio y de cómo hubo que defenderlo y protegerlo para que hoy en día seamos millones las personas que hemos tenido el privilegio de acudir al Museo de El Prado a admirarlo. Pero claro, ya he dicho en otras ocasiones que no hay nada tan frágil y tan controvertido como el denominado Patrimonio Cultural.
En el documental existe una escena en la que hay que desalojar  y hacer bajar de unos camiones a unos soldados heridos porque se necesitan para transportar una serie de cuadros. Desde luego, a los heridos no les hace ni pizca de gracia y no entienden que su vida sea menos importante que unos lienzos. Seguramente que si yo estuviera en su lugar, también opinaría lo mismo. Pero hoy me alegro muchísimo de que haya sido así y les agradezco su enorme sacrificio.

¿Para qué sirve el Patrimonio Cultural?


La Alhambra
Derviches giradores

Parque Nacional de Iguazú

El Patrimonio Cultural se define como "el conjunto de bienes muebles, inmuebles e inmateriales que hemos heredado del pasado y que hemos decidido que merece la pena proteger". Pero no toda nuestra herencia es Patrimonio Cultural: para mí los toros, por ejemplo, no forman parte del mismo y no vale la pena conservar nada referente a la llamada "fiesta nacional"; al contrario, me parece una salvajada y no estoy para nada de acuerdo con peticiones como las del grupo parlamentario de UPyD en el Congreso para que sean reconocidos como tal. (Véase el enlace adjunto: http://www.publico.es/469134/upyd-quiere-que-los-festejos-taurinos-esten-protegidos-como-patrimonio-cultural.) El debate está servido puesto que como hay tantas opiniones como individuos, habrán muchos que no piensen lo mismo que yo al respecto. Pues el Patrimonio Cultural, en este ejemplo, sirve para que nos entretengamos en debatir "toros sí o toros no" y si vale la pena proteger el espectáculo.
Pero en líneas generales y con algunas excepciones por mi parte, el Patrimonio Cultural es tan variado y tan valioso que ojalá me alcanzara la vida y el dinero para poder visitar y conocer todo (o gran parte) de lo que se cataloga bajo esa denominación.
He adjuntado tres fotos que nos sirven de ejemplos: la Alhambra de Granada, la Danza de los Derviches de Turquía y las Cataratas de Iguazú. Contemplando las imágenes, ¿quién puede permanecer impasible ante tanta belleza?. Rectifico: ¿cómo puedo permanecer impasible ante tanta belleza?. A mí me emociona pero estoy segura de que si me dedicara a hacer una encuesta un día cualquiera en una calle cualquiera de nuestra ciudad para averiguar lo que opina la gente sobre la Alhambra, por ejemplo, siendo tal vez la más conocida de los ejemplos, el resultado me afectaría profundamente y en sentido negativo, puesto que creo que hay tanta incultura y tanta falta de educación y conocimiento en nuestra sociedad que da la impresión de que el Patrimonio Cultural es solo comprendido por unos cuantos. Con todo esto no quiero decir que no haya que conservarlo ni dejárselo en herencia a las generaciones futuras en las mejores condiciones; al contrario, debemos protegerlo, restaurarlo cuando haga falta y seguir manteniendo las costumbres hasta que nos de tiempo de inculcar su importancia , "educar" al máximo número de personas y lograr que puedan recrearse en las maravillas que hay repartidas por todo el planeta. También estoy convencida de que la humanidad no "progresaría adecuadamente" si no conociera su pasado, si ignorase el paso de las civilizaciones que la precedieron, si no pudiera emocionarse ante tanta belleza... porque todos estos conocimientos infunden orgullo en el ser humano y estimulan sus ganas de conocimiento y curiosidad. O al menos, prefiero creerlo.

jueves, 19 de septiembre de 2013

¿Realmente la UNESCO sirve para algo?



Nuestro profesor de la asignatura de Patrimonio, Xabi Velasco, nos ha "colgado" en el campus el siguiente titular: "La UNESCO llama al régimen sirio y a rebeldes a preservar el patrimonio histórico". La directora general de la UNESCO, Irina Bokova, dice que "exhorto a todas las partes presentes a tomar las medidas necesarias para evitar que se causen daños adicionales a este patrimonio que se encuentra entre los más preciosos del mundo islámico".
Lo leo y me digo a mí misma: ¿y qué? ¿van a temblar de miedo los sirios? ¿sirve para algo la UNESCO?. Por otra parte, me pregunto si estaré equivocada puesto que si es una institución que ha durado tanto tiempo será porque tiene su importancia y su utilidad. Pues a continuación, me pongo a investigar un poco sobre dicho organismo y averiguo que su principal misión es la de contribuir al mantenimiento de la paz y la seguridad en el mundo a través de la educación, la ciencia, la cultura y la comunicación.... No parece que le haya salido muy bien. En mi modesta opinión, la UNESCO es una organización con unos fines muy idealistas y románticos pero que al carecer de poder sancionador sus "advertencias" no sirven para nada. Yo creo que el único responsable del cuidado de su Patrimonio es su "propio dueño" y que en sus manos está el que toda la humanidad pueda disfrutar del mismo.
Cuando vi la voladura de los Budas de Bamiyán hace ya unos años en la televisión, me llevé las manos a la boca y cerré los ojos. Pues hoy en día, cada vez que veo la misma escena, mi reacción es la misma. Los talibanes, "dueños" por aquel entonces de Afganistán, decidieron que molestaban y los hicieron desaparecer a pesar de todas las peticiones de que no lo hicieran. Ellos ganaron y el resto de la humanidad perdimos. Esto me lleva a pensar que como ningún país debe interferir en los asuntos de otros, me temo que seguirán desapareciendo joyas del Patrimonio Histórico-Artístico-Cultural como éstas sin que ni la UNESCO ni nadie pueda impedirlo.



¿Por qué este título para mi blog?


Los que me conocen saben que acabo de regresar de un viaje por Vietnam y que uno de los lugares que he visitado ha sido la Bahía de Halong. Es un paisaje compuesto por 2.000 islotes, la mayoría de piedra caliza, que se encuentran esparcidos por un área de 120 kilómetros de costa. Algunos de esos islotes tienen huecos que permiten pasar a través de ellos a unas lagunas interiores que son más bellas aún si cabe. La bahía fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1994 y su declaración fue ampliada en el año 2000, siendo desde el 11 de noviembre de 2011 una de las maravillas naturales del mundo. 
Para poder disfrutar de este paisaje incomparable, lo ideal es subir en un barco que durante un día o dos vaya deslizándose lentamente por el llamado Mar de China e ir contemplando el entorno. No quiero seguir describiendo la bahía  porque en la web existe mucha información y muchas imágenes sobre ella, pero si quiero exponer mi impresión y mi opinión sobre mi experiencia en los días que estuve en ella.










Debemos saber que la Bahía de Halong cuenta, aparte de los turistas, con una población de 1.600 personas distribuidas en cuatro aldeas y que viven de la pesca. Se trata de un rico patrimonio que hay que conservar y también darlo a conocer a todo aquel que quiera o que pueda, pero ¿a costa de perturbar la tranquilidad de la gente que vive en la bahía? Digo esto porque son muchos los barcos llenos de turistas que acuden con frecuencia a estos parajes y algunos organizan saraos nocturnos hasta altas horas de la madrugada, alterando (a mi entender) el equilibrio que existe entre hombre-naturaleza-entorno. Pero, claro, para mantener el Patrimonio, hay que rendirse muchas veces a los factores económicos que permiten unos buenos ingresos al país en donde éste se encuentre, independientemente de que se altere el modo de vida de los auténticos habitantes del lugar.  Y no es que esté totalmente de acuerdo, pero hay que rendirse a la evidencia de que casi siempre lo económico predomina sobre todo lo demás.